El PPD, es un partido que en su historia a presentado cambios notables, naciendo como un partido instrumental para derrotarla dictadura, fue capaz de convertirse el año 1993, en un partido programático con una misión clara y con un proyecto político progresista y liberal. Luego y por el liderazgo de nuestras máximas figuras, el PPD tomó la identidad de partido ciudadano (que defendía como león) y que expresaba la diversidad y ansias de libertad de un sector importante de Chile. Asi el PPD como partido nuevo sin ataduras histórico-ideológicas, ha sabido adaptarse a los tiempos interpretando los nuevos sueños y anhelos de muchos ciudadanos, que expresan en diversas encuestas que es el partido con mayor credibilidad y expectativas de crecimiento.
Ahora bien ante el nuevo mapa político chileno, donde muchas luchas se han ganado (ley de divorcio, igualdad de los hijos, fin de la censura, entre otras luchas), donde existe una nueva concertación y ojo una nueva Derecha, donde muchos se desilusionan y retiran del partido, es hora que el ppd presente un nuevo cambio, es hora de que el partido por la democracia vuelva a mirarse hacia adentro y mirar hacia Chile para redefinir nuestra misión en esta nueva sociedad, porque si bien se han ganado muchas batallas aun queda mucho por lo cual luchar, todavía existe injusticia, desigualdad e intolerancia, en distintos ámbitos y sectores de nuestro país, y es el ppd quien por nuestra génesis y nuestros valores puede de mejor manera liderar estas nuevos combates. Pero esto se puede llevar a cabo con un partido fuerte, cohesionado con verdadera convicción de que cada militante hace lo mejor por contribuir con el bien de Chile y no con personas que no comparten nuestro espíritu, que solo entraron al partido por pegas, intereses económicos o por cupos a diputado, necesitamos militantes comprometidos con nuestros valores de izquierda y dispuestos primero a discutir en forma seria sobre nuestros principios y sobre todo sobre nuestro futuro.